Comunicado de prensa de la ADSP-IB: ANTE LA POLÉMICA DEL NOMBRAMIENTO DEL JEFE DE SERVICIO DE NEFROLOGÍA EN EL HOSPITAL SON ESPASES

 

Comunicado de prensa de l´Associació per a la Defensa de la Sanitat Pública de les Illes Balears (ADSP-IB).

Palma, 18/02/2019

Nuestra asociación tiene definidos unos principios básicos en defensa de una sanidad pública y de calidad, principios que también reciben el apoyo  de las organizaciones que forman parte de la Plataforma Ciutadana per la Sanitat Pública de les IB.

Estos principios expresan la necesidad de:

– Una total transparencia en la gestión del sistema sanitario como parte de toda política de gestión pública.

– Una gestión sanitaria pública, con políticas de recursos humanos que potencien la dedicación exclusiva de los profesionales a la asistencia pública.

– Una política de recuperación de las privatizaciones o externalizaciones, mediante la rentabilización de los servicios públicos.

En base a ellos, y ante la polémica del nombramiento del jefe de servicio de nefrología del Hospital Universitario Son Espases (HUSE), exponemos que:

  1. Nuestra asociación quiere manifestar su preocupación por el procedimiento vigente para la asignación de plazas de Jefes de Servicio por parte del Servei de Salut de les IB, muy alejado de los necesarios criterios de igualdad, mérito, capacidad y publicidad, los cuales son inexcusables cuando es convocada una plaza en la administración pública.
  2. El Servei de Salut de les IB debe explicar con absoluta claridad cuáles fueron los mecanismos seguidos para hacer pública la convocatoria de la jefatura del servicio de nefrología, cuáles han sido los criterios y los resultados de la baremación a la que se han sometido los aspirantes así como el informe del comité asesor nombrado a tal efecto.
  3. Consideramos inadmisible que en las convocatorias para cubrir plazas de jefes de servicio médico no se exija el requisito de dedicación exclusiva. Máxime en este caso, donde la progresiva concertación de hemodiálisis en centros privados hace más necesaria, si cabe, la exigencia de incompatibilidad entre la jefatura de servicio y el trabajo en el ámbito sanitario privado para evitar el conflicto de intereses en la gestión de un área tan importante de la actividad sanitaria.